REINO DE INVIERNO

Por una vez, quiero silencio.
Por una vez, oscuridad.
Cerrar los ojos al viento;
sentir vacío, tranquilidad.

Que la negrura me rodee.
Que el aislamiento me proteja.
Que nadie a mí me merodee;
desplegaré mil y una rejas.

Y construiré un gran castillo:
lo cubriré de hielo y nieve.
Jamás se abrirá el rastrillo;
a levantarlo, ¿quién se atreve?

¿Quién?

¿Y quién osa molestarme
en mi torre inexpugnable?
¡Qué osadía incontestable!

¿Acaso toleraré a extraños,
crueles intrusos que me hagan daño?
¡No lo haré en un siglo! ¡Ni en mil años!

¡No!

Rey me he coronado
de un mundo muy gris en perpetuo invierno.
Un trono he colocado:
me gobernaré con mano de hierro.

Me obligaré a estar impasible
ante los crueles golpes de la vida.
Me haré fuerte, me haré invencible;
sí, mantendré mi corona ceñida.

Y al final me sentaré a observar
en mi reino el pasar del tiempo.
Impertérrito y en soledad:
voy a soñar mi propio cuento.

Olivier G. Durán
#NoSoyPoetaSoyTodoIgnorancia